Como ya vimos, la planeación es un proceso gerencial que permite determinar el rumbo de la organización, estableciendo las acciones que se llevan a cabo para enfrentar el entorno y alcanzar la meta deseada.
Un buen proceso de planeación organizacional difícilmente es realizado por una sola persona, si bien la dirección nos indica cuál es la razón de ser de la organización y plantea algunos objetivos, la aportación del personal clave como las gerencias y responsables de procesos es fundamental para desarrollar acciones que regulen la actividad y orienten los esfuerzos en el corto y largo plazo.
Para lograrlo, se convierte la ideología de la dirección en indicadores de medición del desempeño de la siguiente manera:
Establecimiento de la visión, misión y valores de la organización.
Conocimiento del entorno organizacional, factores internos y externos.
Selección de estrategias.
Establecimiento de objetivos.
Realización de planes
Medición del desempeño.
Comencemos a revisar estos puntos.
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